domingo, septiembre 25, 2005

FALLECIMIENTO DE SU GRACIA OBISPO ALEXANDER (MILEANT)

Hace unos días nos llegaba la triste noticia del fallecimiento, a causa del cáncer, de Su Gracia el Obispo Alexander (Mileant), de la Iglesia Ortodoxa Rusa en el Extranjero (ROCOR).

La labor misionero-formativa del obispo Alexander a través, entre otros medios, de Internet con su sitio web http://www.fatheralexander.org/ y, más recientemente, con la fundación del Seminario Ortodoxo de la Santísima Trinidad (http://www.holytrinitymission.org/index_s.php ), será por siempre estimada y recordada, especialmente por muchos cristianos ortodoxos (o no) hispanohablantes que encontraron en sus textos guía, orientación y conocimientos. Nadie, creo, que pueda poner en duda la utilidad de su labor y de sus obras.

Recuerdo que mi primer contacto con Internet, en el año 2001, me llevó en mi demanda de información y conocimientos sobre la Ortodoxia cristiana a la primera de las páginas anteriormente mencionadas y me reforzó en el deseo y la decisión de abrazar la fe cristiana ortodoxa.

Gracias a Roberto León, hermano ortodoxo chileno, contamos con la siguiente traducción de una breve biografía del Obispo Alexander:

Biografía de Su Gracia el Obispo Alejandro (Alexander Vasilievich Mileant), Obispo de la Diócesis de Buenos Aires y Sudamérica


El Obispo Alejandro nació en Odessa el 22 de Julio de 1938. Fue bautizado con el nombre de Alejandro, en honor de San Alejandro Nevsky. Su padre fue reportado como desaparecido en acción durante la Segunda Guerra Mundial en 1941, y posteriormente su familia huyó hacia el Occidente por el avance del Ejército Rojo. La familia primero viajó a Praga, luego Roma, finalizando como refugiados en Buenos Aires, Argentina.


El joven Alejandro asistió a la escuela primaria en Buenos Aires, estudió por 7 años en la escuela de ingeniería eléctrica y, más tarde, asistió a la Universidad de Buenos Aires.


Desde la edad de nueve años, sirvió al altar, primero para el Arzobispo Panteleimon (Rudyk), y luego al Arzobispo Afanassy (Martos). Él se volvió cercano a Vladyka Afanassy, quien le instruyó en teología por más de tres años. Vladyka Afanassy tenía una gran biblioteca de trabajos teológicos, y el joven Alejandro aprendió el Griego moderno y patrístico para leer a los Santos Padres en su propia lengua. En 1963, Alexander ingresó al Seminario de la Santísima Trinidad en Jordanville, N.Y. se graduó del Seminario en 1967 con un grado de Licenciado de Teología. Un año antes de su graduación, fue ordenado para el diaconado por el Arzobispo Averky (Taushev), y durante la Gran Cuaresma en 1967 fue ordenado para el sacerdocio por el Metropolitano Filaret (Voznesensky).


Después de su graduación y ordenación, fue asignado como sacerdote de la Iglesia de la Protección de la Santísima Virgen en Los Ángeles, California, donde sirvió como párroco por 31 años. Los servicios en la parroquia eran oficiados tanto en Eslavo como en Inglés; la parroquia fue también el hogar de una próspera escuela de 110 estudiantes. Entre 1971 y 1985, Padre Alejandro encabezó varios peregrinajes juveniles a la Tierra Santa y a los santos lugares en Grecia.


Mientras servía en la Parroquia de la Santa Protección, Padre Alejandro continuó su educación, recibiendo un grado de Licenciado en Ciencia, y más tarde un Grado de Master en Ingeniería Eléctrica de la Universidad del Estado de California, y un Grado de Ingeniero en Telecomunicaciones y Programación (como aplicadas a las naves espaciales). En este campo, Padre Alejandro trabajó para la NASA; su trabajo también le ayudó a especializarse en la ciencia computacional, la cual le ayudó mucho en la producción de sus folletos misioneros.


Hasta 1998, produjo más de 200 folletos misioneros en Ruso, Inglés y Español, abarcando muchos temas sobre la Fe Ortodoxa y la vida Cristiana, comentarios sobre las Sagradas Escrituras, explicaciones de oraciones, oficios y fiestas de la Iglesia, viadas de santos y sus enseñanzas, y defensa de la fe Ortodoxa contra el sectarianismo y cultos modernos. Desde 1990, una gran cantidad de su literatura misionera fue enviada a la Antigua Unión Soviética, y a otros países donde había necesidad. Todo este material está disponible en su página web, donde cualquiera con acceso a Internet puede descargar e imprimirlos.


Durante la Gran Cuaresma de 1995, Padre Alexander fue tonsurado como monje stavrofor en el Monasterio de la Santísima Trinidad, con el nombre de Alejandro, en honor del Nuevo Hieromártir Alejandro, Arzobispo de Kharkov, que murió en una prisión soviética. Fue más tarde elevado a Archimandrita.


El Archimandrita Alexander fue consagrado para el episcopado como Obispo de Buenos Aires, Argentina y Sudamérica el 15/28 de Mayo de 1998 en la Catedral Sinodal, por el Arzobispo Antonio (Medvedev) de San Francisco y América Occidental, Arzobispo (ahora Metropolitano) Laurus (Skurla) de Siracusa y Santísima Trinidad, Obispo Agafangel de Simferopol y Crimea, Obispo Mitrofan (Znosko) de Boston, y Obispo Gabriel (Chemodakov) de Manhattan.


M. Woerl, Mayo de 2002
[Fuente: "Bishop Alexander (Mileant): A Short Biography" http://www.st-sergius.org/bishops.html ; Traductor: Roberto León Ramírez, Santiago de Chile]
Lamentable pérdida la del Obispo Alexander. Dediquémosle un lugar en nuestras oraciones.
Teofilactos

"TEOLOGÍA ORTODOXA ACTUAL", de K.C. FELMY

Con una periodicidad que pretende ser mensual, iré introduciendo -capítulo por capítulo del libro- una recensión bibliográfica de la obra de Karl Christian Felmy "Teología Ortodoxa actual" (Ediciones Sígueme; Salamanca 2002)(*), con el fin de ofrecer una visión general de la teología cristiana ortodoxa en su estado actual. Dicha recensión, si bien será fundamentalmente analítica, no dejará de lado la labor crítica, sin que este término (crítica) haya de entenderse en su sentido peyorativo, sino como un especial acercamiento del comentarista a la obra de este autor.

He tratado de recabar algunos datos sobre éste, pero no ha sido tarea fácil. Aparte de los datos aportados en las páginas del mismo libro, sólo he podido obtener referencias de otras obras suyas. Nacido en 1938, en Alemania, K.C. Felmy, inserto en la tradición cristiana luterana, participa, desde 1971, en el diálogo con la iglesia ortodoxa rusa. Actualmente es profesor titular de historia y teología del Oriente cristiano en la universidad "Friedrich-Alexander", de Erlangen-Nuremberg (Alemania). Entre sus obras destacan:

  • Symbolik des orthodoxen christentums und der Kleineren Christlichen Kirchen in Ost und West (et al.) 1968.
  • Predigt im orthodoxen Russland: Untersuchungen zu Inhalt und Eigenart der russischen Predigt in der zweiten Hälfte des 19. Jahrhunderts (1972)
  • Die Deutung der Göttlichen Liturgie in der russischen Theologie (1984)
  • Die Orthodoxe Theologie der Gegenwart: eine Einfürhung (1990) / La teologia ortodossa contemporanea: una introduzione (edizione italiana a cura de Antonio Zani; 1999)
  • Teología ortodoxa actual (Tradujo Constantino Garrido; 2002). La obra que comentamos.
  • Dogmatica experientei ecleziale. Înnoirea teologiei ortodoxe contemporane (2005)

E importantes estudios:

  • Eucharistie, Gemeinde und Amt. Ein Neuansatz in russischer Orthodoxie und Luthertum: Kerygma und Dogma (1972)
  • Die Auseinandersetzung mit der westlichen Theologie in den russischen theologischen Zeitschriften zu Beginn des 20. Jahrhunderts: Zeitschrift für Kirchengeschichte (1983)
  • Die Orthodoxe Theologie in kritischer Selbsdarstellung: Kirche im Osten (1985)

Según confesión propia del autor en el prefacio, "la presente obra es una iniciación a la teología ortodoxa, no es una "teología ortodoxa" propiamente tal. Porque exponer la teología ortodoxa -incluida su raigambre en la experiencia de la Iglesia ortodoxa, en la experiencia del culto divino, en la experiencia de la alabanza y en la experiencia de la vida ascética- es algo que puede hacerse también desde fuera. Por el contrario, una "teología ortodoxa" no puede desligarse de la experiencia personalísima. Y esta vinculación es precisamente lo que la presente obra quiere hacer ver".

Así mismo, continua: "En mi trabajo me he esforzado por presentar la teología ortodoxa con los ojos del amor, que es el órgano del conocimiento, pero sin idealizarla. Sobre todo tengo interés, no en presentar toda la amplitud de la teología ortodoxa -eso es imposible-, sino en mostrar algo de la amplitud de posibilidades que aparecen en dicha teología. La teología ortodoxa no es tan monolítica como a ella le gustaría aparecer en ocasiones, ni como afirman algunas críticas".

Para todo ello, como se indica en el comentario de la contraportada del libro, K.C. Felmy va a analizar las obras teológicas de la ortodoxia, pero igualmente tendrá en cuenta los iconos y los poemas hímnicos. De tal modo, resaltará "la experiencia y lo experimentable de una fe que busca ser idéntica a las proposiciones clásicas que siempre se enseñaron en Oriente".

La obra, en sus 349 páginas, se divide en 9 principales capítulos, introducidos todos por algunas frases propias de la Liturgia. Consta así mismo de una bibliografía introductoria, y de índices (onomástico, analítico y general). Al final, se ofrecen 8 láminas con la ilustración de 8 famosos y reconocidos iconos que son comentados en el interior de la obra por el autor.

Espero que la recensión bibliográfica, en sus varias entregas, contribuya al conocimiento de la tradición cristiana ortodoxa, a través de un acercamiento a su más preciado tesoro: su teología que, como bien se destaca en el primer capítulo de esta obra, no es aprensible o íntegramente entendible sin la experiencia eclesial; la teología no se concibe en la Ortodoxia como un conglomerado de constructos teóricos, sino como una práctica que aquiere su pleno sentido en el seno de la Iglesia, a partir de la experiencia, el culto divino y la ascética.

Teofilactos

(*) El precio de esta obra es de unos 22 euros.


viernes, septiembre 23, 2005

PASADO Y PRESENTE DE LA ORTODOXIA EN LA PENÍNSULA IBÉRICA

Una historia de la presencia activa del cristianismo ortodoxo en la península Ibérica está por hacerse; se hará, sin duda, en su momento y con la debida documentación y recogida de los testimonios, orales y escritos, de los actores principales. Aquí sólo pretendo ofrecer, desde mis limitados conocimientos, un breve resumen de lo que esa historia podrá ser una vez la labor historiográfica la materialice.

Los comienzos

Por algunos datos encontrados en Internet, las primeras localidades que acogieron a grupos más o menos numerosos de cristianos ortodoxos serían, obviamente, dada su importancia, Madrid y Barcelona. Y las fechas habría que situarlas a finales del siglo XIX y principios del siglo XX. Entre 1895 y 1917, llegarían a España personas de nacionalidades griega y rusa, trayendo consigo su fe ortodoxa, los primeros a causa –sobre todo- de las actividades comerciales (caso de la Ciudad Condal –Barcelona-) y los segundos a raíz de los sucesos en Rusia de la Revolución de Octubre.

Sin embargo, no parece que estos primeros grupos de personas terminaran por establecer la existencia de una práctica religiosa estable dentro de las coordenadas de la Ortodoxia, e institucionalizada en una forma tanto legal como física de una misión o parroquia. Este hecho es fácilmente comprensible desde el momento en que los grupos nacionales o étnicos minoritarios tienden inevitablemente a ser absorbidos por los mayoritarios y, dado que los puntos en común entre el “cristianismo ortodoxo” y el “cristianismo católico” son más que los divergentes, se haría más fácil los matrimonios mixtos y, a la larga, la integración total. Por otro lado, tampoco puede olvidarse que nos referimos a etapas de nuestra historia donde el confesionalismo del Estado español era más acusado que en la actualidad, por lo que la práctica de religiones y / o confesiones religiosas distintas de la católica era en el mejor de los casos tolerada, pero cuando no dificultada e, incluso, perseguida.

A estos datos podemos añadir un dato curioso. Recientemente mi dedicación a la genealogía me puso al tanto de la existencia prolongada de una relevante comunidad de comerciantes griegos establecidos en Menorca en los siglos XVIII y XIX que, durante estos siglos, conservó su Ortodoxia en varias generaciones y ramas de sus familias. Esta comunidad mantuvo una parroquia en la actual iglesia de la Concepción de Mahón, que cumplía los cometidos religiosos parroquiales para esta importante comunidad que terminó enraizando en la isla y cuya descendencia se extiende en la actualidad por España. Para aquellos que pudieran estar detrás de sus orígenes familiares, los registros y documentos referentes a esta parroquia ortodoxa se conservan en la Iglesia mencionada o, bien, en las dependencias del Archivo Histórico de esta diócesis católica.

La estabilidad

Dejando de lado estos primeros apuntes de los inicios, podemos decir que no es hasta mediados del siglo pasado cuando se cuenta en España con una iglesia ortodoxa que ha mantenido su existencia hasta la actualidad e incrementado su importancia. Se trata de la parroquia de la Iglesia Ortodoxa Griega (IOG) de Madrid, constituida en el año 1949 y dedicada a los Santos Andrés y Demetrio. El templo, de estilo bizantino, fue consagrado el 3 de junio de 1973 y, en la actualidad, tiene el estatus de catedral. Desde hace bastantes décadas su rectoría cae bajo la responsabilidad del arcipreste Dimitris Tsiamparlis y, posteriormente, se ha añadido la labor del padre Rogelio Sáez.

Este es el centro originario de lo que hoy constituye el Arzobispado Ortodoxo Griego de España y Portugal, dependiente del Patriarcado Ecuménico de Constantinopla que, recientemente, ha dispuesto para su dirección a Su Eminencia el Metropolita Epiphanios (Perialas). Cuenta con presencia también en Barcelona, con una capilla (San Nectarios) a cargo del padre Dionysios Stafylakis y, en Portugal, con una parroquia en Lisboa (Santos Nectarios y Gregorio) a cargo del padre Alexandre Bonito y otra en Oporto (San Panteleimón) que está regida por el obispo auxiliar de este Arzobispado, Hilaryon Rudnyk.

Más información: http://p035454545.planetaclix.pt/


El auge

Con los acontecimientos políticos que contribuyeron a la desaparición de los Estados comunistas en los países del Este Europeo y las dificultades subsiguientes de índole político y social y, especialmente, económicas, el número de fieles cristianos ortodoxos en la península Ibérica no ha hecho sino aumentar en proporción considerable debido al fenómeno de la inmigración. Según cálculos que he realizado a partir de datos recabados de algunos Ministerios y de otras fuentes, puede que el número de personas de fe cristiana ortodoxa en España supere en la actualidad la cifra de 300.000, sin contar datos de Portugal (el padre Alexandre Bonito, para el año 2001, en este segundo país, los estimaba en más de 125.000). Ello ha contribuido a que otras Iglesias Ortodoxas nacionales se hayan establecido en España y en Portugal.

De unas décadas posteriores al establecimiento de la Iglesia Ortodoxa Griega, data la presencia de la Iglesia Ortodoxa Rumana en España. Es la más numerosa acorde con el hecho de que los inmigrantes rumanos es la minoría mayoritaria dentro del conjunto de la inmigración procedente de países donde el cristianismo ortodoxo es la confesión religiosa predominante. La primera parroquia (de la Santísima Virgen María) se estableció en Madrid bajo la responsabilidad del arcipreste Teófilo Moldovan, actual Vicario General para España y Portugal. Después se han llegado a constituir un número considerable de parroquias y misiones, 19, sobre todo en el cuadrante nororiental de la Península, con mayor presencia en Cataluña, Madrid y Valencia; también cuenta con parroquias en Aragón, La Rioja y en Andalucía. En Portugal, hay parroquia en Lisboa y otras dos en formación: Oporto y Faro. La Iglesia Ortodoxa Rumana de España y Portugal está integrada en la Metropolía Ortodoxa Rumana de Europa Occidental y Meridional (Patriarcado de Rumanía), bajo la autoridad de Su Eminencia Monseñor Iosif, Metropólita y Arzobispo.

Más información: http://www.mitropolia-paris.ro/?subject=primire/index

El 26 de diciembre de 2001, el Santo Sínodo de Moscú, declaraba oficialmente constituida en Palma de Mallorca, la parroquia de la Natividad del Señor, bajo la rectoría del Rvmo. Archimandrita Makary (Roselló), que es además el actual Vicario General para España y Portugal del Patriarcado de Moscú. Posteriormente, en función de las necesidades se han establecido otras parroquias y comunidades en Madrid, Barcelona, Alicante (Altea), Málaga (Benalmádena), Oviedo y en las dos provincias de las Islas Canarias, Tenerife y Las Palmas. En Portugal se cuenta con parroquias en Lisboa, Porto, Faro, Setúbal y en las Islas Azores (Faial). En Palma de Mallorca cuenta también con el monasterio de la Dormición de la Madre de Dios. El conjunto de la presencia institucional de la Iglesia Ortodoxa Rusa en la Península Ibérica depende de la Diócesis de Korsún, bajo la autoridad del Arzobispo Inokenti, con sede en París.

Más información: http://morkov.org/orthodox.htm

Para terminar con este apartado, citamos también la presencia minoritaria por el momento de la Iglesia Ortodoxa del Patriarcado de Bulgaria. En Barcelona cuenta con una parroquia dedicada a la Santísima Madre de Dios bajo la rectoría del padre Iván Bonev. En Portugal, en Lisboa, cuenta con otra parroquia bajo la advocación de San Juan Rilski, dependiente del P. Goze Hristov. Depende de la Diócesis Ortodoxa Búlgara de Europa Occidental y Central, bajo la administración del Obispo Metropolitano Simeón.

Más información: http://www.rilaeu.com/index.html


Una ortodoxia hispana

Con este epígrafe no quiero dar a entender que las Iglesias Ortodoxas hermanas hasta ahora mencionadas y, lo que es más importante, sus miembros no puedan considerarse –más en el caso de la IOG de tan dilatada presencia en España- Iglesias hispanas (españolas o portuguesas). Antes al contrario, aunque la mayoría de sus fieles sean personas inmigrantes, su contribución de todo tipo a España y Portugal ya los convierte en unos conciudadanos más, merecedores de los mismos derechos que los demás ciudadanos. Muchos, además, habrán conseguido ya las nacionalidades respectivas y sus hijos y nietos estarán plenamente integrados –sin rechazo de sus orígenes y tradiciones- en las sociedades y comunidades de acogida.

Más bien, quiero referirme a otras Iglesias Ortodoxas que, en las décadas de los años 70 y 80, surgieron de los deseos y motivaciones sinceras de fieles cristianos de nacionalidad originaria española y portuguesa.

Por lo que hace a Portugal, en el año 1984, se establece la Metrópolis Ortodoxa de Portugal, España y Europa Occidental, regida en sus inicios por el obispo y metropólita Dom Gabriel, que pertenecía al Sínodo Ortodoxo Griego Vétero Calendarista, del que esta Metrópolis recibió para su constitución un Tomos de Autonomía (27 de septiembre de 1984). Posteriormente, esta jurisdicción ortodoxa –o mejor, sólo sus obispos portugueses y brasileños, no los italianos- es aceptada bajo la protección de la Iglesia Ortodoxa de Polonia, en tanto provincia eclesiástica suya, la Provincia Eclesiástica de Portugal, España y Brasil. Tras el fallecimiento de Dom Gabriel, se suscitaron enfrentamientos y dificultades en el seno de esta Iglesia que llevaron a la desaparición de su presencia en territorio portugués.

Más información: http://www.geocities.com/pro_ortodoxia/

En España, en el año 1972, se va a dar inicio a una de las primeras comunidades cristianas que tiene su origen, no tanto en una tradición nacional religiosa procedente de los países del Este Europeo, sino en la búsqueda y la inquietud espiritual de un pequeño núcleo de personas nacidas y residentes en España, concretamente en Cataluña, movidas por un sincero acercamiento a la espiritualidad de la Ortodoxia. Sin desmayo en su fe, que los refuerza en sus intenciones y en el crecimiento, no sólo espiritual, sino también de nuevos hermanos, tras bastantes años de dificultades por alcanzar un estatus canónico dentro de la Ortodoxia (en sus comienzos estuvo en el ámbito del monofisismo de la Iglesia Ortodoxa Apostólica Antioquena), es el 14 de febrero de 1998 que esta comunidad es recibida en el seno de la Iglesia Ortodoxa de Serbia, dependiendo de la Metrópolis de la Iglesia Ortodoxa Serbia de Europa Occidental, bajo la dirección actual de Monseñor Luka. Su Vicario General es el arcipreste padre Joan García, que ha estado al frente de esta comunidad desde sus difíciles inicios. Tiene parroquias en Cataluña (Barcelona –1 parroquia- y Gerona –3 parroquias-), Comunidad Valenciana (Alicante –1 parroquia) y País Vasco (Rentería –1 parroquia-). Rige un Centro de Estudios Teológicos, dedicado a San Gregorio Palamás.

Más información: http://www.iglesiaortodoxa.es/index.php

Para terminar, quiero destacar la Catolicidad de todas estas Iglesias Ortodoxas que se detalla en el hecho de que, aunque algunas estén en cierto sentido marcadas por una procedencia nacional concreta, sus parroquias acogen en su seno indistintamente a fieles ortodoxos de todas las nacionalidades; razón por la cual en muchas ocasiones el idioma empleado en la liturgia es el castellano (también el catalán o el vasco).

Roguemos a la Santa Theotokos para que, en el futuro que está por escribir, la colaboración fraterna entre todas ellas contribuya a la consolidación de la Ortodoxia en la Península Ibérica para mayor Gloria de su Hijo, Nuestro Señor Jesucristo.

Teofilactos
[Nota: algunos datos actualizados el 12 de abril de 2006]

lunes, septiembre 12, 2005

EN TORNO AL EJEMPLO Y LA OBRA DEL ARZOBISPO IAKOVOS


Hace unos meses, el 11 de abril, fallecía en un hospital de Stamford (Connecticut), de una dolencia pulmonar, a la edad de 93 años, el arzobispo Iakovos de Krinis (Dimitrios Coucouzis), primado de la Iglesia Ortodoxa Griega del Norte y el Sur de América. Toda una figura significativa y representativa de la Ortodoxia en aquél continente, aunque no menos -como se verá- para el resto del cristianismo ortodoxo.

Para esa fecha yo no había aún entrado a formar parte de la gran comunidad que constituye la Ortodoxia Cristiana, estaba en "trámites" -he empleado casi toda mi corta vida en ellos hasta que por fin se ha cumplido mi deseo y decisión-, pero ya la lectura del obituario que sobre el arzobispo Iakovos publicó el diario español "El Mundo" me reforzó en mi personal idea para el futuro de la Iglesia Ortodoxa en los países occidentales y, especialmente, en España, así como me reafirmó en mis intenciones.


He podido recuperar parte de aquella reseña necrológica:

El arzobispo Iakovos imponía respeto sin tener que abrir la boca para defender sus ideas en contra del racismo o de la guerra de Vietnam y de la necesidad de que todas las religiones estuvieran unidas por el bien de los creyentes en Dios o Alá.

Su gran barba, su manto negro y su cofia del mismo color ofrecían en EEUU una imagen de hombre santo e imponente que llamaba la atención y dejaba a muchos boquiabiertos, ya fueran los manifestantes que chillaban contra el imperialismo norteamericano en América Latina o en Africa, como a los policías que cargaban contra los revoltosos.

El arzobispo Iakovos, Jaime en castellano, el primado de la Iglesia Ortodoxa Griega de América, falleció el pasado domingo en un hospital de Stamford, en Connecticut, de una afección pulmonar a los 93 años
...




Sin embargo, a mi me gustaría destacar de este extracto dos aspectos que no se mencionan en este trozo recuperado: su labor en pro del Ecumenismo y sus medidas transformadoras de la Iglesia Ortodoxa Griega de América.

De lo primero un breve apunte: fue el primer jerarca de la Iglesia Ortodoxa en reunirse con un Papa en 350 años; así lo hizo, tras la elección de Juan XXIII, en 1959, con el que sería denominado por los católicos "Papa Bueno". Y esta reunión sería anticipatoria (y preparatoria) de las que más tarde tendría con el Papa Pablo VI, nuestro muy recordado y añorado Patriarca Ecuménico de Constantinopla, Athenágoras I.

[Por lo demás, en parecida dirección, abogó por una mayor interconexión, un mayor intercambio, y diálogo, entre las diferentes comunidades ortodoxas del continente americano pertenecientes a diferentes "obediencias nacionales"]

De lo segundo algo, tal vez, si cabe, más determinante de su labor pastoral en su archidiócesis. Pastor de una comunidad cristiana de más de 2 millones de almas, en su inmensa mayoría inmigrantes griegos y ciudadanos americanos de este origen, supo -atento a los tiempos, atento a los cambios- comprender que un modo de establecer una mejor conexión con las nuevas generaciones era el establecimiento de la liturgia en lengua inglesa, sin que ello significara una renuncia a las tradiciones y cultura griegas ni, tampoco, contravención de la tradición cristiana y la fe ortodoxas.

Posiblemente, en un futuro no muy lejano, aquí en España contaremos también con un pastor de la visión del arzobispo Iakovos. Esta es la aspiración que comparto con los lectores.

Concluyo con algunos datos más sobre su vida:
  • Nacido en Turquía, estuvo al frente de su comunidad desde el año 1959 hasta el año 1996.
  • Estuvo nueve años al frente del Consejo Mundial de las Iglesias; "Ecumenismo", dijo en 1960, "es la esperanza de entendimiento internacional, de alianza humana, de paz verdadera basada en la justicia y en la dignidad, y la continua presencia de Dios en la historia moderna".
  • Marchó junto al luchador por los Derechos Civiles, el reverendo Martin Luther King Jr., en Selma, Alabama, en 1965.
  • Recibió la Medalla de la Libertad de manos del presidente Jimmy Carter en 1980.

Y con una frase del padre Georges Poulos, que escribió un libro sobre la vida del arzobispo Iakovos: "Es el fin de la era dorada de la Ortodoxia en Estados Unidos. No hay nadie en el horizonte que pueda igualar sus habilidades, su caracter y su fe".

Merecida dedicatoria, sin duda, merecido epitafio, pero estamos seguros de que Dios sabrá proveer más "eras doradas" para la Ortodoxia en América...

Teofilactos